Si Lloran

Es increíble la forma en cómo me afecta  ver una persona llorando, incluso a punto de hacerlo, aún más, cuándo los que lloran son personas que aprecio; quisiera tener una solución para darles, quisiera simplemente hacerles reír y así hacer que olviden todo lo que les aqueja, quisiera simplemente llevarlos a un mundo diferente, tal vez de fantasía, en donde todo es felicidad y los pensamientos cobran vida, mundo inexistente, para muchos.

No es muy normal que me vean llorando y casi nunca nadie ha tenido que consolarme alguna vez porque lloré o algo parecido, debe ser por eso que al ver la tristeza de otros, expresada de esa manera, yo escasamente hago caras de compasión, pero nunca encuentro las palabras apropiadas a decir, pues a veces dar soluciones es muy fácil, porque no estamos en los zapatos de los otros; yo prefiero callar y mejor entregar mi compañía, en caso de que pueda servir.

Puedo tildarme de afortunado por participar de los momentos de llanto de muchas personas, por alguna razón estoy yo ahí con ellos y me entregan su confianza, escuchando sus historias y ayudando a que sus sentimientos se liberen un poco, las cargas se van disminuyendo; me gusta ser confidente pero por favor no esperen de mi un consuelo, a duras penas puedo decir: Animo! Pero viene siendo una palabra de poco valor, teniendo en cuenta lo que antes decía, de que dar soluciones es muy fácil.

Los sentimientos causan muchas reacciones buenas, malas, neutras, exageradas, casi nulas, entre otras; y créanme que cuando una persona tiene reacciones malas o negativas, es mejor que ella sola se tome el trabajo de evacuarlas, de reflexionar y tratar de encontrar los pro y los contras y sobretodo de tener muy claro el porqué de dichas reacciones.

Si bien no soy un buen consejero, puedo ser una muy buena compañía, soy muy bueno escuchando; y no ha de ser tan grave, seguramente en momentos de inspiración como los que suelen darme, estén de buenas y les diga lo que están esperando escuchar.

Para todas las personas que han abierto su corazón y entregado su confianza a éste jovencillo… un abrazo grande!

George Anrreque! Mi Tío

Noviembre 19 de 2010 (Fecha de redacción)

Hace ya un año, un año que se ha pasado volando, un año en el que nuestras vidas han seguido su curso, un año sin su presencia, un año dificil, si... Su ausencia, nos llena de tristeza, pero volverémos a verlo...

Siempre tendremos muy bonitos recuerdos de lo que hizo en vida, fue parte muy importante de la familia, un gran icono, tal vez el tío mas querido por todos, estoy generalizando, más bien hablo en lo personal.

Nunca olvidaré los momentos que pasé junto a él en familia, las reuniones familiares donde era el alma de la fiesta, las novenas donde se robaba el show cantando los villancicos a su manera (muy muy chistoso), los dias de rumbas familiares que se emborrachaba y nadie sabia cómo seguia bailando hasta las 5 de la mañana, o de momento caía dormido en donde estuviera y más fácil le quedara; muchos recuerdos nos llenan la mente por estos días, especialmente, pero sé que durante todo éste año lo hemos recordado a cada día, a cada instante, porque a mi, como imagino que a muchos, no me cabe en la cabeza que ya no esté con nosotros, pero es una realidad que poco a poco se va asimilando; nunca se sanará la herida, simplemente se aprenderá a vivir así, y así es como se va yendo la vida, segundo a segundo, hasta que llegue nuestra hora.

Elevo entonces un grito al cielo, en señal de agradecimiento por habernos permitido conocerlo y compartir junto a él, Luzma Pinto nos dijo: "La Prudencia y la Alegría fueron sus grandes virtudes..." y tiene razón, pues un ser humano como Nuestro Hijo, Papá, Esposo, Tio, Hermano, Cuñado, que fue Jorge Enrique Gómez Quintero o George Anrreque, como él mismo decía que su nombre era dicho en inglés, nunca va a existir, y estará por siempre presente en nuestros corazones llenándolos de alegría, más que de tristeza, porque esa chispa que siempre lo caracterizó, es la que se mantiene viva entre nosotros! Un abrazo grande para toda la familia, en especial para Mafe!

Reflexiones

Cada persona tiene su historia, y cada persona dentro de sí, está teniendo simultáneamente una batalla de pensamientos que llegan a perturbar hasta el más calmo de los razonamientos.

No entiendo muy bien el cómo se van dando las cosas, todo siempre pasa de una manera que tal vez no siempre es la esperada, pero pasa como debe ser; de una forma u otra es lo que alguna vez fue escrito por alguien, no sé quién, que decidió eso para quien lo vive, y decidió de esa manera, porque no habría otra posible. Vidas pasan y pasan los sucesos con cada uno de sus detalles; un mundo de energías que está rodeado de sueños y esperanzas que algunos, como ustedes y yo, han imaginado en algún momento de sus vidas; lo único seguro es que dichos sueños y esperanzas no pueden ser cumplidos por nadie más que por quien los ha concebido, y especialmente por el tipo de energía que esté en juego en cada momento.

He empezado a entender un poco la problemática de la gente; las ansias de liberarse de todo lo que les amarra en la vida, y de tener un ritmo de vida diferente, otro tipo de calidad de vida, simplemente han deseado no estar en los momentos universales en que han estado para poder cambiar su tiempo y llegar a donde han querido; muchos momentos de lucha, de desesperación y de tristeza han estancado sus vidas, pero no se han dado cuenta del poder que tienen por dentro, de esa fuerza que puede llevarlos a donde siempre han querido, esa fuerza que ha de impulsarlos mucho más allá de lo que alguna vez pudieron imaginar podían llegar. ¿Pero quién puede hacerles entender eso, más que ellos mismos? ¿Cómo hacer para que despierten de sus letargos y empiecen a vivir? No es sencillo, pero si posible, es entonces en donde entran en juego las demás personas, las que les rodean, esas personas que deben llegar a sus vidas, esas personas que pueden cambiar los paradigmas, incluso romperlos, y hasta eliminarlos, porque en la mayoría de los casos son limitaciones que nos anteponemos, y muchas veces, como el elefante que desde bebé está atado a una cadena que no puede romper y que después de intentar se da por vencido, no nos damos cuenta que somos capaces de romperla, porque ya somos “grandes” y fuertes, como el mismo elefante, que siendo grande tiene la fuerza para hacerlo, pero tiene la idea marcada en su mente... Ser el elefante eestá bien, pero no aquel que se queda atado a sus "limitaciones"; limitaciones? cuáles??? Nadie las tiene! por más dificil que vea la vida, TODO es posible!

Pero bien, hay una esperanza, una luz, y es todo eso que nos está rodeando, todas y cada unas de las vivencias que tenemos, en las cuales debemos incluir, las personas, los detalles, nuestras acciones y pensamientos, para darnos cuenta de que todo puede ser diferente, y los mas importante es que rompamos esas tantas cadenas que tenemos atadas a nuestros pies, e incluso a nuestras manos, y que siempre seamos consientes de que el pasado no determina quienes somos ahora, y que lo que nos queda es lo que viene…

Un Instante

No se si alguna vez les haya pasado (apuesto a que si) que quieren una cosa y se las hace imposible, muy difícil de conseguir o su llegada muy eterna? Me pasa a cada rato, es algo trágico para mi, claro, soy una persona impaciente, desesperada e intensa.

Hoy me sentí algo colérico, pues sentirme impotente (en el buen sentido) me va dañando el genio, pero tengo la capacidad de apocar y evadir ese tipo de sentimientos imaginando escenas cómicas y apartes de mi vida, de la vida de otros (para nada burlón) o del momento preciso que esté vivenciando; a veces invento, suelo tener una imaginación muy ágil y con ella una creatividad impresionante.

En ocasiones, cúmulos de sentimientos me invaden hasta tal punto de no poder evadirlos, y es ahí en ese momento cuando mas necesito de alguien, alguien que me entienda, puede ser simplemente un amigo o amiga, pero casi el noventa y nueve por ciento de las veces que ocurre se hace imposible tener a alguien cerca. Lastimosamente, la confianza con mis padres no es la apropiada y no va tan lejos como para molestarles con mis aconteceres...

La impotencia me invade y me enerva la idea de no poder solucionarlo rápido o simplemente no darle solución porque no se pudo, me gustaría incluso muchas veces obrar por los demás en mi beneficio,. pero estaría siendo egoísta, y mucho!

Retomando la entrada anterior (Y entonces?), tengo  para agregar que las cosas no deben ser forzadas de ninguna manera y que cada cosa que vaya pasando y vaya a pasar, debe dejarse fluir naturalmente, sin afanes, pues es obra de la vida y como tal debemos aceptarla sea buena o mala según nuestro criterio e intereses más significativos.

Lo anterior me causa mucho trabajo aceptarlo y entenderlo, por suerte, una de mis tantas vocesitas (esas que uno escucha, mas bien conocidas como la conciencia) me lo está recordando a cada rato... Y debo hacer que las cosas pasen, de acuerdo a la vida, claro; saber jugar este juego.

Y entonces?

Alguna vez leí que todo pasa como debe ser, y que nada pudo haber sido diferente; es como un juego entre el universo y la vida, más bien como el destino, y creo que entonces, estoy satisfecho con lo ocurrido hasta ahora. No está completado aún el ciclo pero se van creando bocetos de lo anhelado...

Dos décadas...

Y ahí estaba yo, el niño de puritico oro (jajajajajaja según mi abuelita que en paz descanse), a veces no se ni por qué llegué a este mundo, pero las respuestas van surgiendo deliberadamente; soy el hijo menor de tres, tengo dos hermanas mayores, siempre me tildan de consentido y no estoy muy de acuerdo con eso, pero en conclusión es verdad; amo a mis hermanas con toda mi alma, han sido parte importante en mi desarrollo como ser humano, tal vez como persona, sin quitarle crédito a mis padres, que son ejemplos de vida.

Estudié en tres colegios, he vivido en cuatro apartamentos incluido el actual, y ahora soy el hijo único, mis hermanas ya se fueron de la casa y hacen sus vidas fuera de la ciudad, a veces beneficioso, pero otras no, me hacen falta aunque sea para pelearles, pero me aventajan en cuatro y seis años. Así es, nací después de cuatro años; según mi mamá fui una sorpresa que NO estaba esperando, es decir, como un accidente, pero no seamos crueles, digamos mejor que fui como un regalo (modestia aparte), palabras textuales de mi madre: "Me llegó sin yo estarlo pidiendo..." pero para bien o para mal aquí me tienen, y soy de los que piensa que al mundo se viene a hacer algo, a cumplir una "misión", y bueno, espero estar obrando de la manera correcta, y aunque muchas de mis realidades van en contra de lo que está bien, para la generación de mis padres, yo considero que de verdad está bien...

No soy una persona muy extrovertida, mucho menos introvertida, la timidez me puede en la mayoría de los casos, pero es algo que se puede manejar; estudio ingeniería industrial, en mitad de carrera, no muy conforme, pero es por un buen futuro? creo que no, debería apasionarme tanto como lo hago cuando tengo una obra de teatro o los ensayos del taller de ópera, y posteriormente mi primera presentación a manera de musical en un par de meses (o menos ya!); pero no importa, a veces suelo sacrificar mi "felicidad" por entregarla a otros, no es mayor cosa, porque también defiendo mis intereses, y todo ha de ser por un bien, total ya voy en la mitad, y dos años se pasan volando.

He conocido gente maravillosa (no suelo usar ésta palabra pero me parece considerable), gente que de verdad llena; empezando por mis amigos de la universidad, si es que se pueden llamar amigos, pues sí, creo que si están siendo mencionados aquí es porque se han ganado el título; todos y cada uno de los del grupo de actores hacen que cada momento sea muy enriquecedor, he aprendido a conocerlos, a unos más que a otros, pero me agradan mucho; los integrantes del taller de ópera, en especial un puñado de cinco (ellos saben quiénes son), han sido, en estos últimos meses, lo mejor que he encontrado.

El tiempo apremia y esto es algo que no controlo, de igual forma creo que es un buen comienzo, y le doy gracias a la vida, por permitirme poseer una millonésima parte de ella, que por el momento alcanza dos décadas; cuánto más me permitirá poseerla, no se, es su entera decisión...